Ni siento ni padezco,
no me extraña que la gente me vea así,
si es lo que he hecho de mí.
Me veo sola en una calle que no acaba,
ando, pero no alcanzo lo que busco, la perfección.
Se dice que es una mujer que se esconde,
que solo sale para unos cuantos y yo de esos conozco a dos o tres.
Ni yo me reconozco, no sé cual es el momento en el que paré de vivir
y comenzé a existir.
Espero que dentro de este mundo haya un lugar para mí, y si no es así,
al menos quiero volver a vivir.
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